El resultado de las elecciones regionales dejó a varios candidatos y partidos políticos tendidos en la lona, uno de los más golpeados en su propia casa fue el Centro Democrático al ser elegido como alcalde de Medellín Daniel Quintero y no Alfredo Ramos, que parecía ser el favorito según las encuestas. Situación similar se vivió en el Departamento de Córdoba.

Las cifras de las votaciones revelan un significativo cambio en el comportamiento de los electores frente a los partidos en prácticamente todo el país. El candidato liberal apoyado por el CD en Bogotá, Miguel Uribe, quedó por debajo de Hollman Morris de la Colombia Humana.

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Como es su costumbre, el jefe político del CD se pronunció vía twitter y reconoció la derrota en su propia tierra. "Perdimos, reconozco la derrota con humildad. La lucha por la democracia no tiene fin", escribió Álvaro Uribe en Twitter.

El departamento de Córdoba, territorio del uribismo, también produjo sorpresa con la derrota de Carlos Gómez a la gobernación, que tenía el apoyo del CD y el conservatismo, que fue sobrepasado por Orlando David Benítez del partido liberal.

Perdimos, reconozco la derrota con humildad. La lucha por la democracia no tiene fin.

— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) October 27, 2019

Descalabro en Medellín

El candidato Quintero Calle, un joven que se lanzó por firmas con el Movimiento Independiente, le ganó a quien se consideraba era el más grande elector del país, el expresidente Álvaro Uribe. 

Fiel a su pensamiento

Quintero fundó hace varios años el partido el Tomate y a través de él lucho por la conservación del medio ambiente y fiel a su pensamiento sigue firme en que no tiene compromiso con ningún partido y así lo demostró cuando se apartó de la pelea en la que lo quiso involucrar Alfredo Ramos por no pertenecer a una corriente ideológica.

Para los analistas de temas electorales las encuestas se rajaron en el caso de Medellín pues todo el tiempo dieron a Ramos como ganador, con resultados de 35.6 por ciento frente a 26.1 del hoy electo alcalde.

El nuevo mandatario local, que tiene 39 años, logró romper todos los pronósticos y mostrar cómo su ciudad, Medellín, al menos en esta elección, se desmarcó del Centro Democrático y ya no vota por el candidato señalado por el expresidente Álvaro Uribe.

Aníbal Gaviria, si bien punteaba en las encuestas para la gobernación de Antioquia, también dejó mal parado al candidato del Uribismo Andrés Guerra, que tal como le pasó en la elección anterior, cuando se enfrentó a Luis Pérez, quedó de segundo.

Cambia el discurso

Quintero no solo derrotó al candidato del CD sino también a quienes le hicieron campaña negra para desprestigiarlo y tratar de crear pánico en los paisas por una supuesta alianza con Gustavo Petro.

El recién elegido alcalde tiene en la mira a miles de  jóvenes de Medellín que como él viven en las comunas, agobiados por la pobreza y la falta de oportunidades de educación y sin posibilidades de tener un empleo digno.